Varios medios publican hoy que la UER está ‘realmente preocupada’ por la deriva a la que Israel está sometiendo a Eurovisión. Según fuentes internas, existe miedo a que muchos países abandonen Eurovisión si Israel escoge a Jerusalén como ciudad sede de manera unilateral.

La cadena pública KAN y el propio Gobierno de Israel lo tuvieron claro desde el primer momento: Jerusalén 2019, sí o sí. Al iniciarse las negociaciones entre KAN y UER, la tensión crece cada vez más. La UER no se siente cómoda con la decisión preliminar del gobierno, y así se lo ha hecho saber.

De momento Israel no ha dado su brazo a torcer, y sigue promocionando a Jerusalén como capital de Eurovisión cuando ni siquiera la ONU reconoce la jurisdicción israelí sobre la ciudad. Ni la ONU, ni muchos países participantes; como Islandia, que ya considera la retirada como algo factible.

Las negociaciones continúan y las preguntas son cada vez más, más seriasy desconcertanres.